La mezcla asfáltica en frío es una solución para reparar baches y superficies de asfalto o concreto. Se aplica a temperatura ambiente y es una alternativa sostenible a las mezclas asfálticas en caliente.
Particularmente, la mezcla asfáltica en frío es la combinación de uno o más agregados de granulometría controlada, emulsión asfáltica y agua, cuyo proceso de integración, tendido y compactado se ejecuta a temperatura ambiente.